«Es hora de poner fin a la guerra de Gaza», comentó el Secretario de Estado de los EE.UU. a periodistas tras una reunión en Bruselas.

Nueve palestinos fueron asesinados este miércoles a raíz del bombardeo de las fuerzas de ocupación israelíes contra dos sitios de la zona de desastre de Beit Lahia, en el norte de la Franja de Gaza.

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Asimismo, otro ciudadano murió en el bombardeo de la ciudad de Rafah (sur) por un avión no tripulado de la ocupación israelí y una niña de diez años sucumbió a las heridas que sufrió hace dos días en el campamento de Nuseirat (centro), luego de que un bombardeo por parte del ente sionista destruyera la tienda de campaña que los albergaba.

Los ataques del Ejército ocurrieron en los barrios de Al-Shujaya y Al-Zaitoun en la ciudad de Gaza, y los campamentos de Nuseirat y Bureij.

Además, se reportaron bombardeos de la aviación y artillería israelíes contra el hospital Kamal Adwan y otras zonas de Beit Lahia y Jabalia, los cuales dejaron un total de 11 muertos y decenas de heridos.

Al respecto, el secretario de Estado de los EE. UU., Antony Blinken, expresó a los periodistas tras una reunión a Bruselas que “es hora de poner fin a la guerra en Gaza”.

“Israel, según los parámetros que se ha fijado, ha cumplido los objetivos que se había marcado”, dijo el secretario de Estado norteamericano, quien, irónicamente, ha apoyado firmemente a Israel desde que estalló el genocidio el 7 de octubre de 2023.

De acuerdo con datos del Ministerio de Salud en Gaza, el saldo de la agresión israelí en el enclave ascendió a 43.712 mártires y 103.258 heridos.

Agregado a estas estadísticas, la institución de Salud afirmó que el balance aún se encuentra incompleto, puesto que “varias víctimas siguen bajo los escombros y en las carreteras, y los equipos de ambulancias y de defensa civil no pueden llegar hasta ellas”.

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